En las últimas 24 horas, al menos dos personas fueron detenidas por provocar incendios forestales en el estado brasileño de São Paulo. Uno de los arrestos tuvo lugar en São José do Rio Preto y el otro en Batatais, según confirmó el gobernador de São Paulo, Tarcísio de Freitas. Atribuyó parte de los incendios a acciones de criminales, aunque no se dieron detalles sobre la identidad o motivación de los detenidos. El presidente del Instituto Brasileño de Medio Ambiente adelantó que pedirá a la Policía Federal que investigue lo sucedido, ya que existen sospechas de que los incendios estaban organizados debido a que aparecieron casi al mismo tiempo en la región.
En el estado de São Paulo, 46 municipios están en "alerta máxima" para incendios, y 21 de ellos registraban focos activos este domingo. Entre el jueves y el viernes, São Paulo registró 2.316 focos de incendio, casi siete veces más que los contabilizados en todo el mes de agosto del año anterior. Ribeirão Preto, una de las ciudades más afectadas, con 700.000 habitantes, ha tenido que evacuar a algunos vecinos, suspender clases y cancelar vuelos debido a la baja visibilidad provocada por el humo. Además, se han reportado dos fallecidos en Urupês a causa de los incendios.
Las altas temperaturas, la baja humedad y las fuertes rachas de viento han contribuido a que las llamas se multipliquen en São Paulo, el estado más rico y poblado de Brasil. Unos 7.300 profesionales y voluntarios participan en las labores de extinción y apoyo a la población, contando con la ayuda del Gobierno federal y las Fuerzas Armadas. El gobernador de São Paulo agradeció el apoyo recibido y se comprometió a extinguir los incendios lo más rápido posible, mostrando optimismo debido al gran esfuerzo concentrado en las labores de extinción.
Las autoridades esperan que el descenso de las temperaturas y las lluvias de este fin de semana en algunos puntos del estado ayuden a mejorar la situación y controlar los incendios. El Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales ha reportado un incremento significativo en los focos de incendio en comparación con el mismo período del año anterior, lo que ha generado una situación grave en São Paulo. El gobierno brasileño está investigando la posible organización detrás de los incendios, mientras continúan las labores de extinción por parte de profesionales y voluntarios en la región.