La Asociación Dominicana de Profesionales del Cine (ADOCINE), en colaboración con los sectores de la industria cinematográfica en República Dominicana, ha presentado un análisis exhaustivo del impacto de esta industria bajo la ley de cine 108-10. ADOCINE ofrece cifras oficiales como respuesta a aquellas voces que se oponen a la ley, destacando que la industria del cine ha generado más de 25,000 empleos, con un notable 55% ocupados por mujeres.
Hans García, presidente de ADOCINE, destaca que el crecimiento de la industria del cine ha beneficiado tanto a grandes estudios y productoras como a micro y pequeñas empresas locales, que representan el 88% de los proveedores de servicios en esta industria. García señala que la industria cinematográfica dominicana ha impulsado el consumo interno, el emprendimiento y la creación de más de 375 nuevas empresas de servicios y productoras, generando empleos estables y sostenibles.
El informe de ADOCINE revela que la filmación de producciones audiovisuales en República Dominicana ha generado más de 25,000 empleos en los últimos tres años, con un destacado 55% ocupados por mujeres. Se destaca el desarrollo inclusivo y la articulación entre lo público y privado, señalando que el 88% de los proveedores son micro y pequeñas empresas locales, promoviendo el entorno empresarial y la transparencia.
La industria cinematográfica dominicana ha contribuido al desarrollo de las MIPYMES al concentrar sus compras en sectores como comercio, turismo y transporte, representando más del 85% de las compras intermedias de las casas productoras. El cine ha generado empleo en estas comunidades y ha combatido la pobreza, fomentando la especialización en el área y fortaleciendo la clase media con salarios que permiten el progreso de sus profesionales.
En cuanto al aporte de la industria del cine en República Dominicana, se destaca la venta de 4 millones de boletas de cine, con 2.9 millones vendidas por Caribbean Cinemas y 1.1 millones por Palacio del Cine. Además, se han pagado impuestos significativos como el ITBIS y el ISR, contribuyendo al desarrollo económico del país. La industria del cine también ha impulsado la especialización y formación de profesionales a través de universidades locales y extranjeras, generando talento y contribuyendo a la marca país a nivel mundial.
