El doctor Julio César de la Rosa Tiburcio denunció que la autora del atropello que causó la muerte de su hijo, Julio César de la Rosa Peralta, está hospedada en un hotel de lujo en lugar de estar en la Casa del Conductor como se ha informado. Esto causó un receso en la audiencia de medida de coerción que se le estaba realizando a la responsable, Shakie Valentina Mujica Zapata, de 27 años, en el Juzgado de Paz de Tránsito del Distrito Nacional. El presidente de Adocco mencionó que la mujer se estaba maquillando, retrasando así su presentación a la audiencia programada para las 9:00 de la mañana.
De acuerdo con el doctor De la Rosa Tiburcio, la Casa del Conductor se ha convertido en un lugar privilegiado, donde las personas que pagan un seguro reciben ciertos beneficios. Aseguró que la responsable del atropello no está bajo la jurisdicción del Ministerio Público, sino bajo el control de las autoridades de la Casa del Conductor, lo que le permite disfrutar de privilegios que otras personas no tienen acceso. Esta situación ha generado molestia en la sociedad, ya que se considera injusto que una persona cuente con beneficios especiales debido a su condición económica.
La falta de presentación oportuna de la responsable del atropello a la audiencia de medida de coerción ha generado controversia y malestar entre la población, especialmente en el entorno familiar de la víctima. El doctor De la Rosa Tiburcio ha sido vocal en cuanto a la necesidad de que se haga justicia en este caso, y que la responsable del accidente sea juzgada equitativamente conforme a la ley. La presunta preferencia o trato especial que estaría recibiendo la responsable por parte de las autoridades de la Casa del Conductor ha suscitado críticas y cuestionamientos sobre la transparencia y equidad en el sistema judicial.
La situación ha generado polémica y debate en la opinión pública, con llamados a la rendición de cuentas y a la garantía de un proceso justo y equitativo para todas las partes involucradas en este trágico incidente. La percepción de favoritismo hacia la responsable del atropello ha generado indignación en la sociedad, que exige que se respeten los derechos de las víctimas y se aplique la ley de manera imparcial y objetiva. El caso ha puesto de relieve la importancia de la transparencia, la ética y la responsabilidad en el sistema judicial, así como la necesidad de garantizar la igualdad ante la ley para todos los ciudadanos, sin importar su condición socioeconómica.
En medio de la investigación y el proceso judicial en torno a este caso, la sociedad dominicana espera que se esclarezcan los hechos y que se haga justicia para la familia de la víctima. La denuncia del doctor De la Rosa Tiburcio respecto al trato privilegiado que recibiría la responsable del atropello ha generado un debate sobre la equidad y la imparcialidad en el sistema de justicia, y ha puesto en entredicho la eficacia y la transparencia de las instituciones encargadas de administrar la ley. La presión social y la demanda de una respuesta justa y equitativa en este caso son elementos clave para garantizar la confianza de la ciudadanía en el sistema judicial y en el Estado de derecho.
