El presidente Luis Abinader ha proyectado que su reforma a la Constitución dominicana traerá tranquilidad a la sociedad, mientras que su antecesor, Danilo Medina, la ha criticado llamándola "improvisada" y "desorganizada". El Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) también se pronunció al respecto, señalando que el Poder Ejecutivo no consultó con la procuradora Miriam Germán antes de presentar el proyecto. Medina ha afirmado que la propuesta parece más enfocada en la imagen del presidente que en abordar los problemas institucionales de manera rigurosa desde el punto de vista jurídico y político.
En respuesta a las críticas de Medina, Abinader recordó que él también había modificado la Constitución en 2015 e intentado hacerlo en 2019 para buscar un nuevo período gubernamental, algo que él busca evitar con su propuesta actual. El presidente ha destacado que la reforma busca garantizar la tranquilidad de la sociedad al eliminar la incertidumbre que surge cada ocho años en torno a la reelección presidencial. La pieza legislativa presentada al Congreso busca reducir el número de diputados, unificar las elecciones, establecer un ministerio público independiente y limitar los mandatos presidenciales a un máximo de dos períodos.
La propuesta de reforma constitucional ha generado un debate político en la República Dominicana, con posiciones encontradas entre las diferentes fuerzas políticas. Mientras Abinader defiende su iniciativa como necesaria para fortalecer las instituciones y evitar la perpetuación en el poder, Medina y otros críticos la ven como una maniobra oportunista que no aborda los problemas reales del país. La falta de consulta con sectores clave como la procuradora Germán ha sido uno de los puntos de conflicto en torno al proyecto de reforma.
La discusión sobre la reforma constitucional también ha puesto de relieve las divisiones internas en el PLD, partido al que pertenecen tanto Abinader como Medina. La postura oficial del partido en torno a la propuesta de reforma ha sido crítica, cuestionando la falta de rigurosidad jurídica y política en la elaboración del proyecto. La polarización en torno a la reforma constitucional refleja las diferencias ideológicas y estratégicas existentes en el panorama político dominicano, así como la complejidad de abordar cuestiones fundamentales como la reelección presidencial y la independencia del ministerio público.
A pesar de las críticas y la oposición que ha generado, el presidente Abinader sigue adelante con su plan de reforma constitucional, argumentando que busca fortalecer las instituciones democráticas y prevenir abusos de poder en el futuro. La propuesta de reducir el número de diputados, unificar las elecciones y establecer un ministerio público independiente son algunas de las medidas clave que busca implementar para garantizar la estabilidad política y evitar la perpetuación en el poder. El debate en torno a la reforma constitucional continúa en la República Dominicana, marcado por la confrontación entre posiciones divergentes y la búsqueda de consensos en un tema de crucial importancia para el sistema político del país.
