El presidente Luis Abinader habló sobre la República Dominicana siendo un punto logístico para la ayuda humanitaria que entra a Haití, enfatizando la disposición del país para asistir a Haití en asuntos de salud. Sin embargo, dejó claro que no brindarían apoyo para fines militares. Destacó la importancia de Haití como segundo socio comercial en términos de exportaciones. A pesar de los desafíos enfrentados por Haití, Abinader resaltó que el comercio a lo largo de la frontera seguía activo y sin afectaciones.
En días recientes, bandas armadas en Haití se han movilizado en contra de la llegada anticipada de una fuerza multinacional, aprobada por la ONU en octubre pasado, con el objetivo de estabilizar el país. Estas protestas, organizadas por la coalición armada Vivre Ensemble bajo el liderazgo del ex policía haitiano Jimmy Cherisier, también conocido como 'Barbecue'. Abinader también tocó el progreso de su país en la lucha contra la corrupción, enfatizando la necesidad de perseverar en este esfuerzo.
Abordando las preocupaciones sobre los haitianos indocumentados detenidos por las autoridades de inmigración, Abinader reconoció las quejas generalizadas sobre individuos que evitaban la deportación o regresaban de Haití pagando 15,000 pesos (aproximadamente $250). Destacó la importancia de abordar este tema de manera justa y equitativa. En cuanto a la situación en Haití, el presidente expresó su preocupación por la inestabilidad en el país vecino y reiteró la disposición de la República Dominicana para colaborar en la estabilización de la región.
En cuanto a la lucha contra la corrupción en su país, Abinader destacó la importancia de seguir adelante con las medidas implementadas para combatir este problema. Señaló la necesidad de una aplicación efectiva de la ley y de fortalecer las instituciones encargadas de asegurar la transparencia y la rendición de cuentas. Abinader subrayó su compromiso con la transparencia y la integridad en el gobierno, reafirmando su determinación de erradicar la corrupción en todas sus formas.
En relación con la situación en la frontera entre la República Dominicana y Haití, Abinader mencionó la importancia de mantener la buena relación y el comercio activo entre ambos países a pesar de los desafíos y tensiones. Subrayó la necesidad de promover la cooperación y el diálogo entre ambas naciones para abordar los problemas comunes y trabajar juntos en la construcción de un futuro más próspero y estable para la región. En general, Abinader reafirmó el compromiso de la República Dominicana de ser un socio confiable y solidario con Haití, especialmente en tiempos de crisis y dificultades.
