El presidente Luis Abinader expresó la vergüenza que siente República Dominicana por no contar con un estadio de béisbol capaz de acoger partidos de Grandes Ligas, a pesar de ser una potencia en este deporte. Se mostró preocupado por la situación y mencionó que la construcción de un estadio con las características requeridas por las Grandes Ligas sería muy costosa. Propuso que el sector privado sea el principal inversionista en un proyecto de esta envergadura a través de una alianza público-privada para sacarlo adelante.
El presidente destacó que el Gobierno no puede asumir la construcción solo y que es necesario buscar colaboración del sector privado. Señaló que en Estados Unidos muchos estadios son construidos por empresas privadas. El Gobierno está evaluando varias opciones y ofertas para la construcción del estadio, pero los costos de un proyecto de esta magnitud se suman a las necesidades de inversión en otras áreas importantes como hospitales y carreteras en el país.
Además, Abinader mencionó que no tiene previsto asistir al ingreso de Adrián Beltré, ex tercera base dominicano, al Salón de la Fama del Béisbol en Cooperstown, Nueva York. Beltré se convertirá en el quinto dominicano en alcanzar este honor, uniéndose a otros destacados jugadores dominicanos como Juan Marichal, Pedro Martínez, Vladimir Guerrero y David Ortiz. República Dominicana ha sido sede de partidos de exhibición de las Grandes Ligas en varias ocasiones y varios jugadores destacados del béisbol profesional de Estados Unidos son dominicanos.
El presidente resaltó que República Dominicana se proclamó campeón invicto en el Clásico Mundial de Béisbol en 2013, demostrando su fuerza en este deporte a nivel internacional. Sin embargo, a pesar de ser una potencia en béisbol, el país nunca ha sido escogido como sede de las fases de grupos de Grandes Ligas. Abinader expresó la necesidad de contar con un estadio de béisbol moderno que cumpla con los estándares de la liga para poder acoger partidos importantes y eventos deportivos de alto nivel.
En conclusión, el presidente Luis Abinader reconoció la vergüenza que siente República Dominicana por no contar con un estadio de béisbol capaz de acoger partidos de Grandes Ligas, a pesar de ser una potencia en este deporte. Propuso que el sector privado sea el principal inversionista en un proyecto de esta envergadura a través de una alianza público-privada. A pesar de los costos elevados, el Gobierno está evaluando varias opciones para la construcción del estadio y espera poder concretar este proyecto en el futuro para seguir promoviendo el béisbol como deporte nacional en el país.
