A 100 días de las elecciones, Kamala Harris ha recaudado 200 millones de dólares y ha sumado 170.000 nuevos voluntarios en una semana, mientras que su contrincante republicano, J.D. Vance, se ha convertido en un lastre para Donald Trump. La campaña demócrata ha organizado 2.300 eventos en estados clave como Arizona, Nevada y Pensilvania para movilizar a los votantes. Además, se han llevado a cabo videoconferencias y reuniones virtuales con diferentes grupos de electores.

La energía generada por Harris ha sido comparada con la que provocó la candidatura de Barack Obama en 2008. Este fervor ha servido para superar la incertidumbre que se generó dentro del Partido Demócrata tras la débil actuación de Joe Biden en el debate contra Trump. Biden anunció el fin de su campaña a la reelección y pidió el voto para Harris, quien rápidamente logró suficientes apoyos para convertirse en la candidata del partido. Harris adoptó un tono más agresivo, tomando por sorpresa a la campaña republicana.

J.D. Vance ha sido el más perjudicado por los comentarios machistas que hizo sobre Harris en 2021, lo que ha generado críticas e ataques. A pesar de ello, Trump sigue atrayendo multitudes en sus mítines y mantiene buenos números en las encuestas. Trump ha recurrido a ataques personales contra Harris, burlándose de ella en sus discursos. Aunque faltan 100 días para las elecciones, las encuestas ya vislumbran una contienda reñida, con Trump ligeramente por delante de Harris.

La campaña demócrata ha celebrado 100 días hasta los comicios con eventos en todo el país para movilizar a los votantes. La vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris, ha logrado recaudar 200 millones de dólares y sumar 170.000 nuevos voluntarios en una semana. Las redes sociales se han inundado de memes y menciones a la actitud de Harris, resonando especialmente con los votantes más jóvenes.

La energía generada por Harris ha sido comparada con la que provocó la candidatura de Barack Obama en 2008. Tras la débil actuación de Joe Biden en un debate contra Trump, Biden anunció el fin de su campaña a la reelección y pidió el voto para Harris, quien rápidamente logró suficientes apoyos para convertirse en la candidata del partido. Harris adoptó un tono más agresivo, tomando por sorpresa a la campaña republicana y generando polémica con J.D. Vance.

A pesar de las críticas y ataques personales, Trump sigue siendo popular entre sus seguidores y mantiene buenos números en las encuestas. Trump ha recurrido a burlas y comentarios despectivos contra Harris en sus discursos, intentando erosionar su imagen. Las encuestas muestran una contienda reñida, con Trump ligeramente por delante de Harris a 100 días de las elecciones del 5 de noviembre.

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