El gobierno dominicano sigue trabajando para posicionar al país como un destino turístico de primer nivel, sin embargo, enfrenta obstáculos debido a la falta de instalaciones para emitir visas de llegada y visas electrónicas, lo que lo diferencia de otros destinos turísticos con los que compite. Esta deficiencia contribuye a la baja puntuación del país en facilitar visas de turista, según el Índice de Turismo de la ONU, donde el 29% de los países ofrecen acceso sin visa y el 71% restante requiere visas tradicionales.
En 2023, el Ministerio de Relaciones Exteriores (Mirex) procesó 107,066 visas a través de sus oficinas consulares a nivel mundial, principalmente visas de negocios múltiples (84,236), turismo simple (10,282) y turismo múltiple (5,666). A pesar de la disponibilidad de procesos de visas electrónicas (e-Visa) para ciertas categorías, los solicitantes todavía están obligados a concluir el proceso en persona. El e-Visa es una inclusión crucial en el proyecto de Ley 875-78 sobre Visas, actualmente en revisión de Mirex, con el objetivo de alinear a la República Dominicana con los estándares internacionales y agilizar los procesos de adquisición de visas.
El senador Franklin Romero, representante de la provincia de Duarte, destaca la importancia de los avances digitales en la emisión de visas, especialmente para impulsar iniciativas como su propuesta para promover el turismo de nómadas digitales. Romero identifica los obstáculos burocráticos actuales de procesamiento de visas en persona y aboga por alternativas electrónicas para mejorar la eficiencia. Mientras espera la deliberación en la Comisión de Turismo del Senado, Romero subraya la necesidad de e-Visas, especialmente para nómadas digitales que puedan necesitar visas de trabajo con privilegios específicos.
La adopción potencial de sistemas de visas electrónicas podría mejorar la competitividad turística del país y aumentar su atractivo para una audiencia global. A través de la implementación de e-Visas, la República Dominicana podría igualar el nivel de otros países y simplificar el proceso para los viajeros. La actualización de las políticas de visas también podría beneficiar la economía del país al atraer a más turistas y promover la inversión extranjera.