Tras el anuncio de la retirada del proyecto de ley de reforma fiscal por parte del Gobierno, el expresidente Danilo Medina señaló que el presidente Luis Abinader no tenía otra opción debido al rechazo masivo que obtuvo la propuesta. Medina expresó que el proyecto no contaba con los acuerdos necesarios para ser aprobado en la Cámara de Diputados y que era necesario retirarlo para evitar que el pueblo tuviera que pagar una factura de una fiesta en la que no participó. También mencionó que al Gobierno le faltó consultar a la población antes de someter la reforma fiscal.
En un video publicado recientemente, el presidente Abinader anunció que solicitará el retiro del proyecto de ley de modernización fiscal en el Congreso para consensuarlo mejor con todos los sectores y presentar una nueva propuesta más dialogada. El retiro del proyecto se produjo después de las vistas públicas realizadas por la Cámara de Diputados para conocer las observaciones de la población sobre la iniciativa. La mayoría de las ponencias rechazó el proyecto debido a sus impactos en la clase media, incluyendo el Impuesto a la Propiedad Inmobiliaria, el Impuesto al Valor Agregado y la eliminación de incentivos a diversos sectores.
Ahora, la Cámara de Diputados deberá proceder con el retiro oficial del proyecto y centrarse en las dos reformas pendientes: la laboral y la constitucional. Es importante mencionar que el rechazo al proyecto de reforma fiscal evidencia la importancia de la participación ciudadana y el diálogo con todos los sectores involucrados en la discusión de políticas públicas. La decisión de retirar la propuesta fiscal puede ser vista como un acierto por parte del Gobierno al reconocer la falta de consenso y la necesidad de buscar una solución más inclusiva y equitativa.
La crisis creada por el rechazo al proyecto de reforma fiscal pone de manifiesto la importancia de la planificación y la consulta previa con la población antes de presentar propuestas legislativas que afecten a la ciudadanía en su conjunto. La necesidad de una reforma fiscal es innegable, pero debe ser diseñada de manera justa y equitativa, teniendo en cuenta las diferentes realidades socioeconómicas del país. El diálogo entre el Gobierno, la sociedad civil, el sector privado y otros actores es fundamental para alcanzar acuerdos que beneficien a todos los dominicanos y fomenten un desarrollo sostenible y equitativo.
En este sentido, es fundamental que el Gobierno se abra al diálogo con todos los sectores y busque consensos amplios antes de presentar nuevas propuestas legislativas. La participación ciudadana y la transparencia en el proceso de toma de decisiones son elementos imprescindibles para fortalecer la democracia y construir un país más inclusivo y justo para todos. La retirada del proyecto de reforma fiscal puede ser vista como una oportunidad para replantear la estrategia y trabajar en una propuesta más sólida y consensuada que beneficie a toda la sociedad dominicana.