El especialista estadounidense Javier Rodríguez lideró el equipo de asesores técnicos contratados por el Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC) para la auditoría de la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA). Según Rodríguez, República Dominicana demostró cumplir con los estándares de seguridad operacional exigidos por la FAA, ya que en la revisión final no se encontraron fallos sin corregir. La participación del presidente Luis Abinader fue clave para superar el reto de la auditoría Iasa, basada en normas de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), ya que el país no estaba preparado para mantener la categoría 1 en 2020 y posiblemente hasta 2022.
Rodríguez destacó la interacción efectiva entre el presidente Abinader, el director del IDAC, Héctor Porcella, y el ministro de Turismo, David Collado, para impulsar la recuperación y fortalecimiento del sector aeronáutico en República Dominicana. Gracias a estos esfuerzos, el país experimentó un notable crecimiento en su parque aeronáutico, con la incorporación de tres nuevas líneas aéreas y un aumento de cuatro veces en la cantidad de asientos disponibles previos a la pandemia. Esta mejora en el sector se logró con la aprobación de una nueva ley de Aviación Civil, que debía ser actualizada para adaptarse a las necesidades actuales y complejidades de la aviación.
Joaquín Ochoa, asesor internacional contratado por el IDAC, se refirió a la reforma de la ley 491-06 de Aviación Civil, promulgada en 2007, como parte de los acuerdos con la FAA. La actualización de esta ley fue necesaria para mantener una relación bilateral con Estados Unidos y otros países, siguiendo las recomendaciones de la OACI para cumplir con los estándares de seguridad operacional. La nueva ley de Aviación Civil coloca a República Dominicana en una posición ventajosa en términos de seguridad y certificación internacional, brindando tranquilidad a los países receptores y fortaleciendo las relaciones aéreas internacionales.
La actualización de la ley de Aviación Civil también permitirá que República Dominicana mantenga una relación bilateral de intercambio con Estados Unidos y otros países del mundo, cumpliendo con los estándares de seguridad operacional requeridos por la OACI. Esto proporciona una base sólida para la seguridad y el desarrollo del sector aeronáutico en el país, así como una mayor confianza para los usuarios de la aviación en República Dominicana. La colaboración entre el gobierno dominicano y expertos internacionales ha sido fundamental para lograr estos avances y garantizar el cumplimiento de las normas internacionales en materia de aviación civil.
En resumen, la participación del presidente Abinader y la colaboración entre el gobierno de República Dominicana y expertos internacionales han sido clave para superar el desafío de la auditoría de la FAA y demostrar el cumplimiento de los estándares de seguridad operacional en el sector aeronáutico. La aprobación de la nueva ley de Aviación Civil representa un paso importante para adaptar la normativa nacional a las necesidades actuales de la aviación, fortaleciendo las relaciones bilaterales con otros países y garantizando la seguridad de la aviación en República Dominicana. Esta actualización posiciona al país de forma favorable en el escenario internacional y contribuye al crecimiento y desarrollo sostenible del sector aeronáutico dominicano.