En la frontera entre República Dominicana y Haití en Pedernales, justo antes de las elecciones presidenciales y congresuales en República Dominicana, se observa un mercado abarrotado de compradores y vendedores de ambos lados. Cientos de personas se desplazan de comunidades de ambos países para vender productos agrícolas y diversas mercancías. El río, que había crecido por las últimas lluvias, ha comenzado a bajar su caudal, permitiendo que los haitianos crucen hacia el lado dominicano. Se observa una fuerte presencia de soldados y cuerpos civiles para mantener la tranquilidad y evitar el cruce de personas extrañas.
Los compradores haitianos transportan productos adquiridos en establecimientos de Pedernales en motocicletas de tres ruedas, vehículos de cuatro ruedas e incluso furgonetas. En el mercado, se ven motocicletas y vehículos cargados de coco, plátanos, yucas y otros productos agrícolas. El movimiento de vehículos de cuatro ruedas, motocicletas y personas a pies se duplicó en el negocio bilateral este viernes. La vigilancia por parte de soldados del CESFRONT y otros cuerpos es visible para mantener el orden y evitar el cruce de personas no autorizadas hacia el lado dominicano.
Además, la vigilancia se extiende a soldados del Ejército dominicano en otros puntos de control migratorio en Pedernales, con patrullajes de la policía local durante el día y la noche para prevenir robos y actos delictivos. A pesar de la venta de bebidas y productos manufacturados de Haití en las aceras del mercado, se observa una gran variedad de bebidas tanto alcohólicas como enlatadas vendidas por haitianos. A pesar de la libertad de comercio binacional en este lado de la frontera, los visitantes de Pedernales y otras poblaciones evitan comprar ciertos productos como whisky y cigarrillos por temor a confiscación por parte de los soldados.
En este ambiente de intercambio comercial entre la parte oeste de Haití y el sur dominicano, se mantiene una sensación de tranquilidad y libre comercio. El río que había presentado una crecida por las últimas lluvias caídas, comenzó a bajar su caudal lo que ha permitido que los haitianos crucen de su territorio al lado dominicano. Se observa una estrecha coordinación entre las autoridades locales para garantizar la seguridad en la zona y evitar problemas durante este período de alta actividad comercial transfronteriza. La presencia de soldados y cuerpos civiles en puntos estratégicos contribuye a mantener el orden y la tranquilidad en esta región fronteriza.
En medio de la agitación electoral en República Dominicana, la vida cotidiana en la frontera con Haití en Pedernales continúa con normalidad, con un constante flujo de personas que buscan realizar transacciones comerciales en el mercado fronterizo. Se destaca la importancia de esta zona como punto de intercambio comercial entre ambos países, con la presencia de vendedores y compradores de ambos lados que buscan abastecerse de productos agrícolas y otras mercancías. La flexibilidad en el comercio bilateral se ve reflejada en la variedad de productos disponibles y en la libre circulación de mercancías entre República Dominicana y Haití en esta zona fronteriza.