República Dominicana ha reiterado su compromiso de brindar ayuda humanitaria a Haití, su país vecino y segundo socio comercial. El presidente dominicano, Luis Abinader, enfatizó que no ofrecerán ningún tipo de colaboración en temas militares, y que la situación en la frontera entre ambos países se mantiene activa con la celebración de mercados. Según Abinader, el comercio entre República Dominicana y Haití podría ser más activo si no fuera por la presencia de bandas armadas haitianas que controlan zonas fronterizas impidiendo el acercamiento de comerciantes.
En medio de la crisis en Haití, con protestas contra la llegada de una fuerza multinacional para pacificar el país, liderada por Kenia y aprobada por la ONU, el presidente Abinader también destacó los avances de su país en la lucha contra la corrupción. Se han multiplicado las operaciones de la Dirección General de Migración en la frontera con Haití, y se han procesado a varios agentes por corrupción. Abinader comparó la situación con la frontera entre Estados Unidos y México, donde también existen problemas de corrupción que dificultan la lucha contra el tráfico de narcóticos, indicando la necesidad de seguir combatiendo este fenómeno.
Por su parte, el Consejo Presidencial de Transición de Haití ha iniciado el proceso para designar un nuevo primer ministro, luego de las críticas a la designación unilateral de Fritz Belizaire. El Consejo está trabajando en los procedimientos para la toma de decisiones en su seno, con el objetivo de preparar el terreno para la celebración de elecciones presidenciales a más tardar en febrero de 2026. Las candidaturas serán recibidas del 13 al 17 de mayo, y deberán ser presentadas por los sectores que forman parte del Consejo o que se adhieran al Acuerdo Político para una Transición Pacífica y Ordenada.
Haití no ha celebrado elecciones presidenciales desde 2016, cuando Jovenel Moise resultó electo como presidente. Sin embargo, su asesinato en julio de 2021 por un grupo armado en su residencia privada en Puerto Príncipe ha generado una profunda crisis en el país, fortaleciendo a las bandas armadas que controlan gran parte de la capital y otras zonas. En este contexto, la situación política y social en Haití sigue siendo compleja, con la necesidad de una transición política pacífica y ordenada que permita restablecer la estabilidad y la gobernabilidad en el país caribeño.
En cuanto a la relación entre República Dominicana y Haití, ambos países han tenido una historia de desencuentros, pero mantienen una importante relación comercial. República Dominicana se ha comprometido a brindar únicamente ayuda humanitaria a Haití, enfocándose en asistir a la población afectada por la crisis en el país vecino. A pesar de las tensiones en la frontera debido a la presencia de bandas armadas, el comercio entre ambos países continúa activo, siendo Haití el segundo socio comercial de República Dominicana en términos de exportaciones.
En resumen, la situación en Haití sigue siendo compleja, con protestas contra la fuerza multinacional aprobada por la ONU para pacificar el país, y la apertura del proceso para designar un nuevo primer ministro. Mientras tanto, República Dominicana continúa brindando ayuda humanitaria a Haití y combatiendo la corrupción en su frontera. Ambos países mantienen una relación comercial importante a pesar de sus diferencias, y se espera que la estabilidad política y social en Haití mejore a medida que avance el proceso de transición en el país.
