Observadores de la Organización de los Estados Americanos (OEA) se reunieron con las autoridades de la Policía Militar Electoral (PME) para revisar las medidas de seguridad aprobadas para las elecciones presidenciales y congresuales del 19 de mayo. Durante la reunión, el Mayor General Juan José Otaño Jiménez presentó el plan de seguridad operativa a los representantes de la OEA y detalló las estrategias de despliegue y coordinación entre las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional. Se aseguró que todo el personal está capacitado y preparado para cualquier eventualidad, además se explicaron los protocolos de gestión de conflictos y protección de los derechos humanos.
Los observadores elogiaron las nuevas medidas implementadas a solicitud de la OEA desde el último proceso electoral en febrero, como asignar personal femenino a cada recinto electoral y aplicar medidas de seguridad para evitar la instalación de carpas o mesas no autorizadas. Se discutió también la importancia de facilitar el trabajo de los observadores de la OEA y de la prensa, asegurando que tendrán todo el apoyo necesario para realizar sus tareas de observación de manera efectiva y segura.
El General Otaño Jiménez enfatizó que "la transparencia y la seguridad son pilares fundamentales en nuestro esquema operativo", y se comprometió a garantizar que el proceso electoral se desarrolle en un ambiente de paz y respeto, proporcionando la confianza necesaria para que los ciudadanos voten con total tranquilidad. Los representantes de la OEA expresaron su satisfacción y gratitud por la apertura y cooperación de la PME, reconociendo los esfuerzos realizados para garantizar un proceso electoral transparente y seguro, resaltando la importancia de la colaboración entre las autoridades locales y los observadores internacionales.
En otro orden, el presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE) pidió a los partidos políticos no adelantar conclusiones sobre la transparencia y el funcionamiento del proceso. El presidente del TSE, Mariano Rodríguez, recordó a las organizaciones políticas que deben respetar el trabajo de las instituciones encargadas de velar por la legalidad del proceso electoral, ya que adelantar conclusiones sin pruebas puede generar desconfianza en la ciudadanía. Rodríguez enfatizó que la legitimidad del proceso electoral se evaluará en función de los resultados finales y en base a pruebas concretas, por lo que es fundamental esperar a que concluya el proceso para emitir juicios.
Se espera que estas elecciones sean un hito en la historia del país y que marquen un antes y un después en términos de transparencia y confianza en el sistema electoral. La cooperación entre las autoridades locales, las fuerzas de seguridad y los observadores internacionales es esencial para garantizar un proceso electoral limpio y democrático. La confianza de los ciudadanos en el sistema político y en la legitimidad de las elecciones es crucial para mantener la estabilidad y el desarrollo de la República Dominicana.