Durante el primer trimestre del año 2024, las remesas recibidas en la República Dominicana alcanzaron la cifra de 2.635,6 millones de dólares, lo que representa un incremento del 6,2 % en comparación con el mismo período del año anterior. Según el Banco Central dominicano, este aumento se debe en parte al buen desempeño económico de los Estados Unidos, país desde el cual proviene el 86,4 % de los flujos formales de remesas en el mes de marzo, totalizando 727,8 millones de dólares.
En marzo, se recibieron en la República Dominicana 925,5 millones de dólares en concepto de remesas, lo que significa un aumento del 1,1 % en comparación con el mismo mes del año anterior. España fue el segundo país que más remesas envió, con un total de 57,4 millones de dólares, representando el 6,8 % del total. Le siguen Italia y Haití, con un 0,7 % y un 0,6 % respectivamente, mientras que otros países como Suiza, Canadá y Panamá también contribuyeron en menor medida a los flujos de remesas recibidos.
El Banco Central destacó la importancia de las remesas como una línea de apoyo vital para las familias receptoras, ya que estas contribuyen directamente a la reducción de la pobreza y la desigualdad en el país. Según estudios realizados por el Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla), el 96,5 % de las remesas recibidas en marzo fueron destinadas a gastos del hogar, mientras que el restante se utilizó para saldar deudas de los hogares receptores.
Este crecimiento continuo en la recepción de remesas en la República Dominicana durante el primer trimestre del año 2024 refleja la importancia de este flujo de dinero para la economía doméstica. Además, la tendencia al alza de estos flujos interanuales muestra una contribución significativa de la diáspora dominicana en el exterior, especialmente desde países como Estados Unidos, España, Italia y Haití, entre otros, que envían fondos a sus familiares en el país.
En conclusión, las remesas continúan siendo un pilar fundamental en la economía dominicana, proporcionando apoyo financiero a las familias receptoras y contribuyendo de manera directa a la reducción de la pobreza y la desigualdad en el país. El aumento en la recepción de remesas durante el primer trimestre de 2024 evidencia la importancia y relevancia de este flujo de ingresos para la estabilidad económica de la República Dominicana y el bienestar de sus habitantes.